jueves, 1 de enero de 2009

DE LA MILI

DE LA MILI

Yo, como expliqué en la presentación del blog, hice la mili y con creces pues estuve seis años. La verdad es que de ese periodo de tiempo nada más que guardo gratos recuerdos, quizás porque los recuerdos ingratos he procurado borrarlos de mi mente.

Mi decisión de dedicarme a la carrera militar, se debió en parte a que yo, venía de un convento y lo único que me enseñaron en él fue obedecer, y en parte porque andaba desorientado y no estaba muy ducho en eso de tomar decisiones personales ni acertar en responsabilidades, lo que me obligó a refugiarme bajo el capote castrense. Como arma, escogí Aviación y como especialidad una, que nada más entrar yo, quedó a extinguir: Fotografía y Cartografía. Que quede constancia que no tengo ni la menor noción de una ni de la otra, y aunque tuve tiempo sobrado de aprender, no anduve muy diligente en hacerlo, y los que tenían que enseñarme, no perdían el sueño porque yo aprendiera o no. El caso, es que tras un breve periodo de aprendizaje e instrucción, me ví, gurripato (gurriato) perdío, y con el grado y nombramiento de soldado de 1ª cartógrafo –fotógrafo, me largaron de Cuatro Vientos (Madrid) a Armilla (Grananda) en tren, en lugar de hacerlo en avión como hubiera sido lo lógico…. Pero claro, eso de la lógica es una cosa y lo de la logística, otra, así que yo llegué más verde que una lecchuga y a pèsar de ello, me vi metido de lleno en las labores propias de la especialidad.

Sin apenas sobresaltos, fue transcurriendo mi escaso aprendizaje, hasta el infausto día en que llegó a la base ,en vuelo de entrenamiento, un teniente piloto procedente de Alcantarilla. Celoso de cumplir extrictamente las reglas, solicitó el plan de vuelo de retorno. Era por la tarde, y todo el personal realmente especialista se había marchado a su domicilio, de manera que según la logística que no la lógica, me correspondia a mi el realizarlo. Angustiado, llamé al sargento que hacía estos trabajos, y desde su casa me informó de que el asunto no tenia nada de dificultad, que tomara la carta aeronáutica de Grananda –Alcantarilla, y anotara en el plan de vuelo los grados , que eran unos números que había entre las dos lineas del trayecto.

Yo, aún no me explico como lo hice, ni qué carta cogí ni que números apunté, el caso es que pasados unos quince dias se me requirió ante el Coronel de la base, ante el cual se sostuvo el siguiente diálogo:

_! A la orden de Usía, mi coronel, se presenta etc etc¡
_ ¿Estaba vd de servicio tal día en la sección de Cartografía?
_ Si, mi coronel.
_ ¿Es esta su firma? dijo mientras me mostraba un duplicado del dichoso plan de vuelo.
_Sí, mi coronel.
_ Bien, pues vaya Vd al Cuerpo de guardia y notifique al oficial de guardia que está Vd arrestado a calabozo durante…15 días por ahora.
_ ¡A la orden de Usía , mi coronel ¡.y dando una media vuelta impecable iba a salir del despacho , cuando se me detuvo
_ ¿No pregunta Vd el por qué de su arresto? Preguntó el coronel con semblante cansado
_No, mi coronel, porque algo habré echo mal…supongo...-Respondí mitad por peloteo y mitad por lógica militar (que no por logística)
_ ¿Mal?-Bramó el coronel.-¡ Más que mal… ha mandado Vd a un teniente piloto a un lugar inexistente en el Pacifico¡ ¡Váyase que ya veremos!.
El "ya veremos del coronel" habida cuenta de que ya me había arrestado, y conociendo su benevolencia, me supo a reducción de pena, pero lo que peor me supo del asunto fue el cruel, aunque certero, comentario del capitan ayudante que alcancé a oir cuando abandonaba el despacho: "Con especialistas como estos, la verdad es que no necesitamos enemigos, mi coronel",
Quiero en este momento hacer constar que la inmensa mayoría del personal specialista, estaba altamente cualificado.
Con la apreciación del capitán ayudante,nada más que había comenzado mi calvario , pués durante los tres días que duró mi arresto, el desfile por el calabozo tanto de alumnos de la Escuela Elemental de Pilotos , como de los oficiales e instructores de vuelos,fue incesante: !Todos querían conocer al individuo al que no debían pedir un plan de vuelo¡
En honor a la verdad, ni el arresto se reflejó en mi expediente, ni el arresto lo fue tal, ya que al ser profesional, por parte de los responsables de la guardia gozaba de ciertos privilegios que me hizo mucho más llevadera mi corta estancia en el calabozo.
Bueno, quizás algún lector haya sacado la impresión, por mis comentarios, de que en los cuarteles se descuidaba la instrucción del personal, y al decir instrucción, me refiero a conocimientos, no a marcar el paso, que de eso andaban sobrados las tres ramas de nuestro ejercitos.Nada más lejos se la realidad , como ilustra el siguiente poema, cuyo autor desconozco:

LA LECCION EN EL CUARTEL

Quiso cierto coronel

con plausible pensamiento

que todo su regimiento

se ilustrase en el cuartel.

Y los sargentos, nombrados
quedaron sin excepción ,
para dar diaria lección
instructiva a los soldados.
Un sargento perro dogo,
en cara y en intenciones
y por sus explicaciones
más perro que pedagogo,
de esta manera decía
a la valiente reunión
de soldados que instruía:
-Muchachos, os voy a explicar
lo que es nombre sustantivo.
Es nombre, hablando a lo vivo,
to lo que se pué tocar:
el pelo…los carzones…
el fusil…las municiones…
en fin, to lo que se pué palpar.
Quedó la mar de contento
con esta definición
que remató su lección
magistral, el buen sargento.
Y por querer comprobar
de su magisterio el fruto,
escogió al quinto mas bruto
para poder preguntar:
-A ver, quinto tú…!sí, tú¡
Se quema una casa enCai
¿Cuántos sustantivos hay
y cual con exastitú?
-Ahí no hay sustantivo, mi sargento.
-¡Infeliz,¡ ¿por qué pierdo el tiempo
ennseñándote a ti?
-¡Pero por via de San Roque¡
(exclama el quinto con flema)
Po si la casa se quema…
¿Cómo quié Vd que la toque?

Bien, con más omenos fortuna, creo que el poemilla ilustra la preocupación de nuestroa mandos poe elevar el nivel intelectual de la tropa.

Por supuesto que tuve más anécdotas de las que aquí reflejo, pero plasmarlas todas, haría este apartado interminable, no obstante, si algún lector quiere contar la suya, que la escriba en comnetarios,